DESCRIPCIÓN

Suspendido sobre el mar, el antiguo pueblo de Eze conserva todo su encanto con el pasar de los años. Las ruinas de su castillo medieval, sus pequeñas callejuelas estrechas, la pequeña ciudad atrae a artesanos y a artistas. Bien instalados en antiguos establos o apriscos en la planta baja de los antiguos edificios, ellos contribuyen a enriquecer el ambiente agradable de este pueblo encaramado.
Conocido por su calma, Eze ha recibido a muchos escritores y artistas de renombre. Recordaremos sobre a todo a Nietzsche. El filósofo habría escrito aquí su famoso "Así habló Zaratustra".Un recuerdo que perdura a través del camino de Nietzsche.

HISTORIA

El pueblo de Eze conoció sus primeros ocupantes en la prehistoria. Sin embargo, los primeros en instalarse han sido los Celta-ligures. Luego llegaron los fenicios. Después los sarracenos tomaron el lugar de los romanos. Finalmente Eze vuelve a ser parte de Francia, en todo caso al menos por un tiempo ya que no será definitivamente parte del territorio francés hasta 1860. A través de siglos, en la ciudad se construyeron importantes fortificaciones para resistir a los invasores. De esas instalaciones, actualmente ya no queda gran cosa. Por orden de Louis XIV, las murallas y el castillo han sido desmantelados. De aquellos tiempos, sólo una doble puerta fortificada que aseguraba la entrada de la ciudad perdura.

ANIMACIONES

La artesanía local es parte de la vida de la ciudad. Podréis descubrir los pequeños puestos recorriendo sus callejuelas. Eze igualmente posee algunos lugares de culto como la Capilla Sainte-Croixmbién con el nombre de Capilla "des Pénitents Blancs", construida por la hermandad del Rosario en 1713 o la Iglesia Notre Dame de l’Assomption. Las ruinas del castillo y las murallas dan testimonio de la importancia estratégica de la ciudad con su Poterna, la doble puerta fortificada o incluso la Puerta de los Moros y la "Demeure des Riquiers"…
Cada año, una fiesta medieval “Eze d'Antan” nos hace revivir los años pasados del pueblo de Eze. Otros eventos dan color a la vida en Eze, en el Astrorama, en particular, se pueden observar las estrellas tranquilamente.

PASEOS

En cuanto a la naturaleza, el parque de la Revere y la Gran Cornisa permiten disfrutar de una bella vista al borde del mar. Para los paseantes en busca de inspiración, el camino de Nietzsche es ineludible y es consustancial a la reputación de la ciudad. Eze dispone de otros espacios verdes como el jardín exótico o el jardín de Eze que permite descubrir las esculturas de artistas expuestas allí.

DEPORTES

Para los deportistas, Eze ofrece la posibilidad de practicar actividades náuticas, tenis, du golf, así como una multitud de otras actividades y también el senderismo…

SITUACIÓN y ACCESO

La pequeña ciudad de Eze se encuentra entre Niza y Mónaco. Muy cerca se encuentran las villas de la Turbie, Villefranche-sur-Mer, San Jean Cap-Ferrat, Beaulieu, Cap d’Ail…
Por aire:
El aeropuerto internacional Niza Costa Azul es el más cercano. En Mónaco un helipuerto permite hacer el trayecto entre el Principado y el aeropuerto de Niza.
Por carretera:
Por la autopista A8, viniendo de Niza, coger la salida 57 - la Turbie. Luego seguir la ruta D45 hasta Eze village. En el otro sentido, salir de Mónaco y seguir a Eze village por la cornisa media ("corniche moyenne"). También se puede llegar por la costa del mar siguiendo la "basse corniche" (RN98) o incluso desviándose por la "moyenne corniche" (RN7) o por la "grande corniche" (D2564).
Por tren:
La estación de Eze-Bord-de-Mer es servida por la red de trenes TER de la región.

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